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DIETA PARA LAS PERSONAS MAYORES


No todas las personas mayores deben seguir la misma dieta, ya que las necesidades nutricionales varían según factores individuales como el estado de salud, condiciones médicas, nivel de actividad física, preferencias alimenticias, cultura y metas personales. Los factores que influyen y cómo adaptar la dieta para personas mayores son los siguientes:


Factores que influyen en las necesidades dietéticas de las personas mayores:

  1. Estado de salud:

    • Enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, insuficiencia renal o problemas cardíacos requieren dietas específicas (baja en azúcar, baja en sodio o rica en proteínas, según el caso).
    • Problemas gastrointestinales como gastritis o estreñimiento también demandan ajustes (más fibra, menor acidez, etc.).
  2. Pérdida de masa muscular (sarcopenia):

    • Requiere mayor ingesta de proteínas de alta calidad (pescado, huevos, carne magra, legumbres) para mantener la fuerza y prevenir caídas.
  3. Condiciones dentales o deglución:

    • Personas con dentaduras incompletas, problemas para masticar o disfagia (dificultad para tragar) necesitan alimentos más blandos, triturados o líquidos.
  4. Metabolismo más lento:

    • Las necesidades calóricas suelen disminuir con la edad, pero las necesidades de nutrientes clave como proteínas, vitaminas y minerales se mantienen o aumentan.
  5. Estado cognitivo:

    • Las personas con demencia o Alzheimer pueden tener problemas para recordar comer o preferir ciertos alimentos. En estos casos, la dieta debe ser sencilla y fácil de manejar.
  6. Restricciones culturales o preferencias personales:

    • Las costumbres alimenticias o restricciones (como dietas vegetarianas) también influyen en el diseño de un plan dietético.

Recomendaciones generales para la dieta de personas mayores:

Aunque no todas las dietas son iguales, algunas pautas generales son aplicables:

  1. Macronutrientes:

    • Proteínas: Incluir fuentes magras como pollo, pescado, huevos, legumbres y lácteos. Ayudan a mantener la masa muscular y fortalecen el sistema inmunológico.
    • Carbohidratos: Priorizar carbohidratos complejos (avena, arroz integral, quinoa, vegetales) y limitar los azúcares refinados.
    • Grasas saludables: Optar por grasas insaturadas como el aceite de oliva, aguacate, nueces y pescados ricos en omega-3.
  2. Micronutrientes esenciales:

    • Calcio y vitamina D: Para prevenir la osteoporosis (leche fortificada, quesos bajos en grasa, pescados con espinas, y exposición al sol).
    • Hierro: Importante para prevenir anemia (carnes magras, espinacas, lentejas).
    • Vitamina B12: Su absorción disminuye con la edad, por lo que puede requerir suplementos o alimentos enriquecidos.
    • Fibra: Ayuda a combatir el estreñimiento (frutas, verduras, cereales integrales).
  3. Hidratación:

    • Muchas personas mayores no sienten sed con la misma frecuencia, por lo que es esencial recordarles que beban agua, infusiones o caldos regularmente.
  4. Porciones pequeñas y frecuentes:

    • Para personas con poca hambre, distribuir las comidas en 4-6 porciones pequeñas al día puede ser más efectivo.

Ejemplos de dietas adaptadas a situaciones comunes:

  1. Persona con diabetes:

    • Dieta baja en carbohidratos simples.
    • Alimentos de bajo índice glucémico (quinoa, batata, vegetales).
  2. Persona con hipertensión:

    • Baja en sodio (evitar alimentos procesados).
    • Rica en potasio (plátano, espinaca) y magnesio (almendras, semillas).
  3. Persona con problemas de masticación:

    • Alimentos blandos como purés, sopas, batidos y carnes desmenuzadas.
  4. Persona con pérdida de peso involuntaria:

    • Aumentar la densidad calórica con grasas saludables (aguacate, frutos secos) y batidos ricos en proteínas.


Cuidador integral recuerda que No existe una dieta única que funcione para todas las personas mayores. Es necesario personalizarla según sus necesidades y condiciones específicas, siempre bajo la supervisión de un médico o nutricionista. Esto asegura que reciban los nutrientes esenciales para mantener su salud, prevenir enfermedades y mejorar su calidad de vida.

Un abrazo cuidador

MSc. Juan Carlos Fernández Díaz

Director de la RLC


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